Nota random 1
Ultimo domingo del año. Doble resumen, de la semana y del año. Así recupero un poco el espíritu con el que abrí este Substack, sin aspiraciones de ningún tipo, ni literarias, ni políticas, ni filosóficas, ni a la paz, ni a la otra (si, es un guiño a esto)
I
Mujeres en heladeras. Parece que es un "algo" en la cultura pensar en el tropo que acabo de mencionar, que consiste en poner a mujeres en situaciones de daño (que se mueran, o que se enfermen, etc) para motivar al personaje masculino a actuar. Esto parecería ocurrir con frecuencia en el mundo de los comics. Wikipedia dice que fue acuñado en 1999 por Gail Simone (https://en.m.wikipedia.org/wiki/Women_in_refrigerators). Hay hasta un sitio donde se recopilan todas estas situaciones (https://www.lby3.com/wir/women.html). Es sexista esto? Seguramente podemos mencionar muchas instancias en las que es un allegado masculino al héroe el que la pasa mal. Claro, pero como el mismo artículo de Wikipedia menciona al abordar estas respuestas, quizá un punto es que la mujer dañada nunca retorna a su estado natural, mientras que los allegados masculinos al héroe sí lo hacen.
Me gusta el ejercicio de identificar patrones de daño, es algo que uno puede hacer para trabajar justamente cuestiones de justicia, de poder, etc. Preguntarse quién termina jodido no de manera incidental, sino de modo consistente, regular. Luego, es fácil pensar que es un tema de diseño, intencionado o no. Siempre es el diseño, el sistema.
II
Justamente, hablando de los patrones, de la estructura, viene a cuento la última parte de este texto de Labaqui (https://seul.ar/milei-populista/).
Las formas hacen al fondo. La convivencia democrática se dificulta cuando el otro es percibido como un enemigo. La democracia es un régimen en el que los oficialismos a veces pierden elecciones y deben ir al llano. Pero ¿cómo tolerar esto si quien está enfrente es un enemigo? Volver a hablar de “zurdos”, “gorilas”, “lucha contra el comunismo” es un verdadero triunfo cultural de la nostalgia setentista. Como en el final de “[Deutsches Requiem](https://www.literatura.us/borges/deutsches.html)“, de Jorge Luis Borges, es menos importante la identidad del vencedor que el triunfo del método.
Pensando en política, uno a veces se pregunta dónde está el poder. Pues bien, el poder está en la capacidad de crear una perspectiva, un lenguaje, el tablero y las piezas con las que juegan los demás. El kirchnerismo hizo eso y ahora vemos su gemelo opuesto. El poder está en las categorías que usamos para pensar el mundo social. Acá podríamos pensar en la idea de que se muere el perro pero la rabia queda, digamos.
III
De la muerte de Beatriz Sarlo se ha hablado mucho y yo confieso con cierta vergüenza que no ha tenido en mí el impacto que ha tenido sobre otras personas a las que, más o menos ampliamente, les interesa la cultura. Creo que nunca he leído nada suyo y mi registro es solamente a partir de sus opiniones políticas, muy malas, muy superficiales y caprichosas, dichas por alguien que encima parece que piensa que entiende del asunto. Siempre con coraje, claro, y con inteligencia. Estuvo donde tenía que estar en el momento correcto, pero en cuanto a su capacidad de análisis político, flojo.
Lo cual no dice nada en absoluto sobre su estatura intelectual y su legado, que es enorme. Schumpeter se preguntaba por qué gente súper inteligente en su dominio de especialización era sin embargo tan pava para pensar en política. Bueno, había decía cosas que ahora no recuerdo, pero sirve pensar el tema atendiendo a una máxima: no encandilarse por el efecto Halo, que es justamente la idea de transferir una propiedad valiosa de una persona al resto de su identidad. Que alguien juegue bien al fútbol no lo hace experto en moda, que alguien cante bien no lo hace un buen político, etc.
Última sobre esto. Monjeau (Eugenio) escribió esta nota hermosa sobre Sarlo en Seul (esta) y aproveché para sacar artistas que ella escuchaba. Conecto mucho con la música que le gusta a otros. En esa nota tan bien escrita por el tan inteligente Monjeau, aparecen: Cecil Taylor, Fred Hersch, Ralph Alessi y Rudresh Mahanthappa. También la Segunda Escuela de Viena: Schoenberg, Berg y Webern. Nice.
Pero del texto me queda una reflexión que me ha atravesado como una flecha, la idea de que Sarlo no hacía cosas sin importancia. Tomo la máxima y la guardo para seguirla: no hacer cosas sin importancia. El tiempo es fugaz, (https://es.wikipedia.org/wiki/Tempus_fugit), no puede uno andar desperdiciándolo (o sí, pero a conciencia, con lo cual deja de ser un desperdicio). No, pero en serio, el tiempo es fugaz. Creo que es lo más importante que uno puede llegar a entender en la vida. O lo primero importante que tiene que entender, después hay otras cosas.
IV
Gaby Saldaña la clava otra vez en el ángulo al poner en palabras algo que muchos venimos sospechando: la descomposición de la esfera pública ha dado un paso más hacia el envilecimiento (https://x.com/MissLadrillos/status/1871006009986253298).
Gaby le responde a uno que contesta con vulgaridad y desprecio. No es gran cosa en Twitter ese comportamiento, salvo que ahora parece tener un tinte más salvaje, menos cuidadoso del otro, menos respetuoso. Y no son chicos, ya. Son gente grande que ha perdido frenos inhibitorios (porque se lo permiten desde arriba, acota Gaby a una usuaria que se pregunta por qué este deterioro tan rápido).
Es preocupante esto. Como hubo excesos y sobre todo engaños amparados en una ética del cuidado, pareciera que ahora hay vía libre para ser malos, como dice Mauro Entrialgo al hablar de "malismo":
Bien, eso es todo. No ha sido tan difícil y puedo percibir que tiene cierta utilidad hacer este “brain dump” semanal, como para tener alguna perspectiva de en qué anduve, qué pensé. Estoy leyendo un libro de Carrere (Yoga) y tomando notas pero ahora solo quería mencionar que él (Carrere) cita a un tipo que más o menos recomienda anotar todo lo que se le pasa a uno por la cabeza durante tres días, y ahí se vuelve evidente la cantidad de ideas originales que se le ocurren.
Bueno, nada de eso ha ocurrido acá, pero sigo el mismo espíritu: recolecto, marco cosas que me parecen interesantes, y las pongo acá. Termina siendo lo que termina siendo, una nota random.
Adeu


